Me presento, Baltasar o Baldassare para servirle

¡SALUDOS! en esta primera entrada a modo de presentación de nuestro querido Baltasar, voy  hablaros de él de una forma básica, ya que tampoco quiero que os agobiéis y penséis: ¡vaya turra!

Bien, yendo a lo importante, nuestro amigo Baltasar Castiglione, procede de un pequeño pueblo, una localidad llamado Casatico, (¡qué nombre más bonico!), también conocido como Marcaria actualmente, en la provincia de Mantua, de la región de Lombardía. Nació un 6 de diciembre de 1478, perteneciente a una familia noble y adinerada, los Castiglione.

Su padre, Cristóforo Castiglione, era un hombre de armas, duro y estricto, y su madre, Lucia Gonzaga, pertenecía a una familia de prestigio que gobernaba Mantua. Nuestro amigo Baltasar se convertirá, ya no de hecho sino de práctica, en un considerado noble cortesano y militar (llegará a ser el Conde de Novellata), un político y diplomático y, sobre todo, en un gran escritor, contribuyendo así al fortalecimiento del Renacimiento humanista en Italia. En resumen, hacía de todo el buen hombre.

Mapa de Italia, Mantua [Imagen de Trentino-Alto Adige in Italy.svg]

Baltasar tuvo una formación Humanista, algo debido a su marcha en 1494 a Milán, donde estudia en una escuela de Giorgio Merula y Demetrio Calcondila. En 1499 se produce un triste acontecimiento, la muerte de su padre, tras lo cual, ha de volver a Mantua para hacerse cargo del título de su padre, de su casa y sus tierras, encontrándose además, subordinado a Francesco Gonzaga, familiar de su madre.

De esta forma, breve eso sí, es como se plantan las bases de lo que será su amplia carrera y su vida, con una importancia vital, como ya hemos dicho, en la literatura italiana con su obra Il Cortigiano de 1528, en castellano, El Cortesano, traducida por Juan Boscán en 1534, seis años después que el libro original, y cinco años después del momento en el que nuestro querido Baltasar, va a saltar (nótese el juego de palabras) a la tumba, es decir, le alcanzaría la muerte. Lamentablemente no vería todo el impacto que su obra generaría, pero ese tema ya es otro que trataré para vosotros, junto muchos otros, en las sucesivas entradas que están por llegar. Antes de despedirme, os dejo este vídeo que considero curioso, música maestro:



¡Hasta la próxima entrada!

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